El embarazo y el parto son experiencias irrepetibles en la vida de una mujer. Aunque no estés esperando tu primer hijo, cada embarazo es único.
Es un momento de cambios acelerados, que se ven sólo en el cuerpo, sino también en tu estado emocional, en tu relación de pareja y en tu vida cotidiana.
Para muchas mujeres es un periodo de sensaciones fuertes y cambiantes, e incluso contradictorias. Por esto, una adecuada preparación física y afectiva te ayudará a atravesar y disfrutar esta etapa.
Es recomendable que, antes de embarazarte, te asegures de que estás en un buen estado de salud física y que empieces a cambiar ciertos hábitos para ir adaptando tu cuerpo y tu estilo de vida a la llegada de un hijo.
LOS PRIMEROS PASOS
• Es conveniente que empieces a cuidarte con anticipación.
• Debes revisar tu alimentación y tus hábitos y tratar de abandonar para ti y para tu futuro bebé.
• Una dieta equilibrada, dejar de fumar, en caso de que hagas, no consumir alcohol y empezar a planificar la vida de a tres.
Papá también se prepara
El apoyo afectivo del padre durante el embarazo y el parto es un de los sostenes fundamentales de la futura mamá. La espera de un hijo es una oportunidad excepcional para compartir alegrías y temores, emociones y proyectos.
Por eso es muy importante que el hombre también se prepare para ser padre, que se involucre en el embarazo, el parto y la crianza del bebé y acompañe a su mujer en esta etapa tan importante de sus vidas.
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